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En mi experiencia trabajado en el mundo empresarial y con equipos de proyectos, la comunicación ha sido el gran reto, en múltiples ocasiones he participado en reuniones que concluyen con un mensaje expresado y múltiples interpretaciones, producto de la rapidez, la urgencia en generar soluciones, las aprehensiones para mostrar oportunidades de mejora, las dinámicas que promueven una vorágine de competitividad entre equipos de trabajo y el elemento de poca educación en modelos conversacionales, esto último ha sido uno de los aprendizajes más valiosos adquiridos en mi certificación como coach Ontológico, aprender a comunicar y diseñar espacios de conversaciones conecten con congruencia y coherencia la intención del objetivo común del equipo y la tarea a desarrollar, valorando la expresión de cada individuo.
Algunos elementos de comunicación en la práctica de coaching ontológico, que he incorporado y promuevo en mis equipos de trabajo, son:
- Conciencia Lingüística: El lenguaje es importante, prestar especial atención a las palabras, no solo desde la riqueza semántica, es esencial cuidar nuestras declaraciones, la pragmática, la comunicación, el momento, el tono, la intención, el contexto, ya que estos elementos pueden cambiar sustancialmente la interpretación que damos a las palabras.
- Observación y Escucha: Desarrollar una mayor capacidad de observación y escucha, permite identificar patrones de pensamiento y comportamiento que pueden estar limitando las relaciones, el crecimiento personal y del equipo.
- Emociones y Cuerpo: Estar atentos tomando conciencia de la relación de las emociones y el cuerpo, somatizamos nuestras emociones y comunicamos nuestras emociones con el lenguaje corporal, al trabajar en la integración de ambos, promovemos una mejor coherencia en la comunicación y un mayor bienestar y eficacia.
En mi experiencia complemento los elementos de comunicación con la promoción de una mentalidad de crecimiento en el equipo, en el libro “Mindset”, Carol S. Dweck (PhD), describe las diferencias entre una mentalidad fija, que ve las habilidades como algo inmutable, y una mentalidad de crecimiento que cree en el esfuerzo y la práctica para llevar al desarrollo y éxito.
Me gusta pensar que, al promover el esfuerzo en la práctica de una mejor comunicación, creamos desde el liderazgo efectivo un ambiente propicio individual y organizacional para afrontar los desafíos como oportunidades de aprendizaje y crecimiento.
Francy García
Coach | COA 8545